El autor de Love Hina rechaza que las empresas en el extranjero censuren los mangas

El mangaka Ken Akamatsu (autor de Love Hina) fue llamado por la Cámara de Consejeros de Japón para que compartiera ideas sobre cómo fortalecer la industria del manga, ya que Ken Akamatsu respalda la idea de salvaguardar la libertad de expresión y desea evitar la censura impuesta por plataformas extranjeras.

con respecto a cómo pueden ayudar a que florezca la industria del manga, con el venerado mangaka creyendo que la libertad de expresión es vital mientras desean evitar la regulación de plataformas extranjeras

Ken Akamatsu (creador de Love Hina, Negima, UQ Holder!) compartió el siguiente extracto de la conversación que tuvo en Twitter:

Me invitaron este mes a un debate en la Cámara de Consejeros, donde un miembro de la cámara me preguntó «¿Para que el manga japonés sobreviviera en el mundo, qué tipo de política sería necesaria»?, motivo por el que expresé «En primer lugar e innegablemente, la libertad de expresión. En comparación con otros países, la libertad de los autores que residen Japón es su fuerte. Sin embargo, con más plataformas de empresas extranjeras convirtiéndose en un oligopolio, quiero evitar una situación en la que las obras japonesas sean reguladas por normas impuestas por el extranjero».

El mangaka también propuso que los manuscritos sin procesar se almacenen, se exhiban y se moneticen a través de un Centro Nacional del Manga, protegiendolos adicionalmente de que se filtren en el extranjero. Ademas, si estas ideas se implementaran, Akamatsu afirmó que la industria del manga seria fuerte en la siguiente década.

Akamatsu también mencionó que varios miembros de la cámara que asistieron expresaron su apoyo a los puntos que menciono. Lamentablemente, en occidente vivimos una época de incertidumbre, ya que es muy frecuente que obras sean modificadas y censuras, sin el consentimiento del autor, solo para satisfacer todas exigencias de todas las personas que se sienten ofendidas por una obra ficticia que no representa la realidad.