Una leyenda japonesa: Furby

Cuando era chico me encanta mi Furby.
Era, simplemente, la sensación de los juguetes.
Me encantó enseñarle a hablar y alimentandolo, hasta que encontre el truco… Solo presionaba el botón de su lengua y quedaba lleno.
Bueno, como sea, el Furby es una leyenda “Made in Japan”.

Un Furby es un juguete electrónico fabricado por Tiger Electronics (subsidiaria de Hasbro. Sus ventas se dispararon y mucha gente hubo de aguardar horas de cola a las puertas de los comercios para adquirir un ejemplar del Furby en las nuevas remesas que recibían los establecimientos.
Pese a que su precio era de unos 30 dólares, la demanda de los muñecos durante las vacaciones de verano del 98 hicieron que los precios de reventa aumentaran hasta los 100$, y en ocasiones, mucho más. Se llegaron a vender más de 27 millones de ejemplares en el primer año de comercialización.

El plural de Furby es Furbys. Por su apariencia, un Furby es un híbrido entre ratón, gato, murciélago, y búho.

Hasta el momento se distinguen dos generaciones de Furby, cada una con una variante de Furby infantil, denominadas Furby Baby.

La atracción que ofrece es su aparente ?inteligencia? y capacidad de aprendizaje al mejorar sus facultades para hablar. Se creía, erróneamente, que podían repetir lo que oían a su alrededor, por lo que muchas agencias de inteligencia prohibieron la entrada del muñeco en sus oficinas.
También puede comunicarse vía un puerto infrarrojo. Los Furbys empiezan hablando únicamente en Furbish, un idioma compuesto de pocas palabras, sílabas simples y sonidos varios, pero está programado para hablar cada vez menos Furbish y más español (o el idioma del país en el que se ha distribuido) a medida que ‘crece’.

La lista de los sensores externos (y por tanto los estímulos que podemos hacer llegar al Furby) incluye: emisor y receptor de infrarrojos, detector de inversión (Furby boca abajo), lengua (pulsación al darle de comer), espalda y barriga (pulsadores de presión) y micrófono simple (para escuchar ruidos).

Son populares entre algunos hackers, que han logrado interactuar con los Furby mediante las señales de infrarrojos.

En octubre de 2005 ha aparecido la segunda generación de Furbys, coincidiendo con una campaña publicitaria de precalentamiento. La cadena comercial El Corte Inglés comenzó las reservas del nuevo Furby a principios de septiembre. Junto con el nuevo Furby se regalaba un DVD con una película de animación y un certificado de nacimiento del Furby.

Son de mayor tamaño que los anteriores, pero dotados de expresividad facial y un avanzado (para ser un juguete) sistema de reconocimiento de voz, que permite una mayor interacción con los humanos. Además, incluye la opción de poderlo enviar ‘a dormir’ con una simple orden, gran carencia de todos sus antecesores. Es capaz de balancearse lateralmente moviendo las patas, y al hablar mueve la barriga e incluso dormir

El nuevo Furby es capaz de ‘relacionarse’ con otros de su generación, y también con los anteriores. No obstante, al no disponer de un puerto de infrarrojos como la generación anterior, la comunicación es limitada.

La nueva versión de Furby ha recibido críticas templadas por parte de los aficionados. Dispone de un solo juego interactivo (una variación del “un dos tres pica pared”), no tiene nombre propio, y tiene muchas secuencias establecidas que le restan variedad. Un año después de su lanzamiento se mejoró la línea con los Funk Furby, con nuevas coreografías de baile, más canciones y nuevos juegos.

En este momento me gustaría estar charlando con mi furby… ¿qué le habrá pasado?

Fuente: http://www.worldanime.tv/?p=13627